España está entregada.
Por Iñaki. - Monday, Sep. 16, 2002 at 8:16 PM

Horas antes de la brutal represión en Bilbao la Unión Europea y Estados Unidos, expresaron su incondicional apoyo al presidente Aznar contra las acciones de ETA y de sus "brazos políticos".

La presidencia de la Unión Europea y el gobierno de Estados Unidos expresaron este sábado su apoyo a la lucha antiterrorista de España contra ETA y al proceso de ilegalización de Batasuna. El ministro de Justicia norteamericano, John Ashcroft, aseguró que su país siente los atentados de ETA como ataques contra él mismo.
"El terrorismo es un problema interno de la UE, en particular en España, donde la especial situación está reclamando una acción", declaró en referencia a la ilegalización de Batasuna la ministra danesa de Justicia, Lene Espersen, cuyo país preside la Unión este semestre. "He expresado nuestra solidaridad con el Gobierno español en sus esfuerzos por luchar contra la cara odiosa del terrorismo", añadió Espersen
Los ministros españoles de Justicia e Interior, José María Michavila y Ángel Acebes, expresaron su satisfacción por "haber contado con el apoyo expreso y eficaz de la Unión Europea y de Estados Unidos en la lucha contra el terrorismo". "Saben que no son acciones contra la libertad de partidos, de opinión o expresión, sino que son acciones contra el terrorismo", estimó Michavila en relación con el proceso de ilegalización de Batasuna. "Todos han entendido y apoyan la acción".
Según contó Acebes, el fiscal general Ashcroft (que se reunió con los titulares de Justicia y de Interior de los Quince) dijo que Washington considera los atentados de ETA "como un ataque a la democracia y lo considera como propio".
Acebes también reveló que Ashcroft "esperaba que a muy corto plazo Estados Unidos pudiese ofrecer resultados concretos a España en la lucha contra el terrorismo de ETA como los que España había ofrecido a Estados Unidos en la lucha contra Al Qaeda".
Omitiendo la historia en la que el pueblo vasco fue el único lugar de la península donde los moros no pudieron establecerse. No recordando que el pueblo de Euskal Erria fue el gran enemigo interno que tuvo Franco en su ductadura, los ministros españoles entregaron a sus homólogos europeos y estadounidense documentación sobre el proceso de ilegalización de Batasuna y de lucha contra ETA y manifestaron su "beneplácito por el apoyo vertido contra el terrorismo vasco".

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