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JAVIER OMAR ROJAS PEREZ, ASESINADO POR LA POLICÍA
Por reenvío agencia walsh -
Tuesday, Nov. 11, 2003 at 8:15 AM
COMUNICADO DE PRENSA-GATILLO FACIL LA UNICA FORMA DE TERMINAR CON LA MALDITA POLICIA ES CON JUSTICIA JAVIER OMAR ROJAS PEREZ (1971-1995)
El martes 11 de noviembre del 2003 a las 12 hs. La Sala III del Tribunal de Casación Penal de la Provincia de Buenos Aires, deberá decidir si el agente Diego Centurión, que asesinó a Javier Rojas Pérez en 1995 y fue dejado libre en un vergonzoso juicio por la Sala III de Lomas de Zamora, seguirá gozando de la impunidad que le da ser miembro de la Policía Bonaerense.
El 30 de junio de 1997 se llevó a cabo el juicio oral y público contra el agente Diego Centurión, durante el cual el Fiscal Dr. Eduardo Tubio pidió quince años de prisión por encontrar al policía culpable de homicidio simple con dolo eventual.
El hecho se había producido el 23 de julio de 1995, en Wilde, cuando personal policial que buscaba a varios desconocidos que habían cometido un delito horas antes ingreso al bar “Cadorna”, donde comían pizza algunos integrantes de una grupo de rock, entre los que estaba Javier Rojas Pérez. En momentos en que los uniformados hacían salir a los jóvenes a la calle entre insultos y golpes, el policía Centurión tomó a Javier del cabello y le disparó al rostro con su arma reglamentaria, aplicando para ello según las pericias realizadas durante la investigación una fuerza de 3 ½ Kg. Javier falleció en el acto.
La sentencia se conoció el 3 de julio de 1997 y cambiaba la carátula por la de homicidio culposo, condenado a Centurión a sólo tres años de prisión.
El dictamen fue apelado por el Fiscal ante la Corte y el cambio del Código de Procedimientos lleva a que sea el Tribunal de Casación Penal de la Provincia de Buenos Aires el encargado de impartir justicia.
Luego de ocho años de espera, el fiscal Dr. Dr. Altuve pide al Tribunal de Casación que vuelva a calificar el hecho como homicidio simple con dolo eventual y fije sentencia.
Todas las esperanzas de la familia de Javier están puestas en esta instancia que puede llevar a encontrar finalmente esa JUSTICIA que hace ocho años vienen reclamando.
JUSTICIA PARA JAVIER. JUSTICIA PARA TODOS
Gabriela Rojas Pérez: 4764-0590 1556132297 - Guacolda Pérez: 4633-2155 loncopiyan@ciudad.com.ar
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Después, por Eduardo Galeano (texto aparecido en la revista La Maga el 7 de agosto de 1996)
Fue asesinado en una cervecería en los suburbios. Un policía lo mato por error, o porque andaba con una guitarra y tenia el pelo largo y no sabia bajar la cabeza ante la autoridad. El policía lo agarro por el pelo, le metió el caño de la pistola en un ojo y le disparo.
Javier Rojas fue enterrado en Buenos Aires. Y mientras en Buenos Aires se abría la tierra para recibirlo, muy lejos de allí en Antofagasta, tembló la tierra donde Javier había nacido. Un maremoto venido muy del fondo de las aguas sacudio violentamente aquellas costas, mientras el entierro ocurría. Y Gabriela la hermana de Javier, pensó que Dios no existe pero los Dioses sí.
Desde la noche que murió Javier, Gabriela perdió el olfato. Dejo de sentir el olor de las plantas, que habla por ellas, y el olor de las pieles, que revela a la gente, y el olor de los libros viejos, que es olor del tiempo en que fueron leídos.
Ayelén, la hija de Gabriela supo de la muerte del tío y lloro hasta vaciarse: Después consulto el asunto con su mejor amiga, Una pajarita invisible que duerme arriba del ropero y se llama Bocasuscia, por su tendencia a las malas palabras. Y tras mucho charlar con la pajarita Ayelén pregunto a su abuela: - Sí Javier no esta ¿donde esta? -En el cielo-dijo la abuela. Y la niña quiso saber: -Y en el cielo ¿hay policías?