Uno de los ternados del gobierno adquirió tierras fiscales a través de terceros
Por Diario Rio Negro - Thursday, Jan. 08, 2004 at 12:04 PM

Es el camarista Jorge Sommariva, uno de los preferidos por el gobernador para llegar al TSJ. En la década del '80 compró tierras fiscales en sociedad con otras personas en la zona de Pilo Lil.

INVESTIGACION

Uno de los ternados del gobierno adquirió tierras fiscales a través de terceros

Es el camarista Jorge Sommariva, uno de los preferidos por el gobernador para llegar al TSJ. En la década del '80 compró tierras fiscales en sociedad con otras personas en la zona de Pilo Lil. No figuró en la operación porque está inhibido por ley para adquirir esos lotes, pero confirmó a "Río Negro" que es el dueño a través de testaferros. El intendente Podestá lo ratificó.

NEUQUEN (AN)- El juez Jorge Sommariva, un favorito del gobernador Jorge Sobisch para ocupar una de las tres vacantes del Tribunal Superior de Justicia, es propietario, junto con otros tres socios, de un campo de más de 6.000 hectáreas que no está declarado en su patrimonio porque lo compró a través de testaferros.

El campo está ubicado en un lugar privilegiado por la naturaleza, en el paraje Pilo Lil, en proximidades de Aluminé, y tiene, entre otros atractivos, 15 kilómetros de costa de río.

El magistrado accedió a esta propiedad de forma irregular porque las tierras son fiscales y los empleados públicos están inhibidos por una ley a realizar este tipo de operaciones.

La existencia de esta propiedad surgió tras una investigación de "Río Negro". La operación fue confirmada por el propio juez y por uno de los protagonistas, el actual intendente de Zapala, Raúl Podestá.

En la década del '70, cuatro amigos de Zapala se juntaban para ir a cazar a un campo sobre la costa del río Aluminé, en el paraje Pilo Lil, un paraíso del interior provincial. Con el tiempo pusieron el dinero y compraron esas más de 6.000 hectáreas, pero no todos figuraron en la operación: en particular uno de ellos, al ser funcionario de la justicia, tenía vedado por ley la adquisición de tierras fiscales. Era Sommariva, quien en diálogo con un periodista de este diario confirmó la información, pero luego dijo que si se publicaba la iba a desmentir. "Yo no podía figurar, por eso la compré con testaferros. Pero el campo es mío", dijo el juez (ver aparte).

El intendente Podestá fue uno de los que participó en la operación. "Sommariva no figuró porque había una prohibición para que los funcionarios públicos compraran tierras fiscales", dijo ayer (ver aparte).

Fuentes judiciales dijeron que dentro de ese poder es conocido que Sommariva tiene el campo, pero lo que no se sabía es que no figura a su nombre. También indicaron que, en caso de que el actual camarista haya cometido un delito al realizar la operación comercial, ya estaría prescripto y por lo tanto de nada no se lo puede acusar legalmente.

Sommariva es el más antiguo funcionario de la justicia que integra las ternas. Entre 1965 y 1989 se desempeñó en Zapala, ocupando los cargos de secretario civil, defensor oficial, agente fiscal y juez de Cámara. En esa época se realizó la operación comercial. Cuando el bloque de diputados peronistas lo invitó a participar de una audiencia pública para debatir sus antecedentes profesionales y su situación patrimonial, se negó pero aclaró que aceptaría si lo invitara la Legislatura en pleno. Por su antigüedad, podría ser el próximo presidente del Tribunal Superior de Justicia. Junto a Eduardo Badano y Jorge Fernández, también camaristas penales, son los tres candidatos de Sobisch para ocupar las vocalías vacantes del TSJ.

Cuatro amigos

Los amigos que participaron de la compra de las tierras son, además de Sommariva, Darío Podestá (hermano del intendente); Hugo Servera y Alberto Falcioni, un médico que falleció poco tiempo atrás.

El campo está ubicado cerca de la confluencia de los ríos Aluminé y Quillén y llega hasta el arroyo Nahuel Mapi (ver infograma). Está fraccionado en cuatro lotes de 5.064 hectáreas, 1.116, 200 y 19 hectáreas.

Una persona llamada Mario Ochoa, que ya falleció, era titular de una tenencia precaria de esas tierras fiscales. Lo utilizaba como campo de veranada para su ganado, había edificado una vivienda y además explotaba una hostería. Los terrenos ocupan 15 kilómetros de costa del río Aluminé. Hay bosques de roble y araucaria, y ciervos, que los amigos iban a cazar, además de sectores óptimos para la pesca. Muchos pobladores de Zapala y de Aluminé consultados por "Río Negro" durante esta investigación identificaron rápidamente las tierras cuando se les preguntó por "el campo de Sommariva". Lo mismo sucedió con funcionario de la justicia, que escucharon al camarista hablando de sus tierras en aquella zona.

Los que figuraron inicialmente como propietarios fueron Servera y Raúl Podestá, quien aseguró que a los pocos meses vendió su parte a los otros socios quienes al parecer tenían distintos motivos para no aparecer como compradores.

El negocio de la compra de las tierras lo habría llevado a manos de los socios Darío Podestá, quien tampoco podía figurar en la compra porque en ese entonces ocupaba un cargo público.

Este diario no pudo precisar cuánto se pagó por estas tierras, pero se calcula que podrían valer unos tres millones de dólares, aunque Sommariva dice que su precio se ubica en la mitad.

La propiedad, según reconoció Sommariva, fue escriturada durante una de las gobernaciones de Felipe Sapag, la del período 1983/87. Una fuente consultada por este diario indicó que en 2001, con Sobisch al frente del Ejecutivo, se inició otro expediente. Sería una nueva escrituración porque habría habido una división en la sociedad.

El camarista dijo que pondrá el campo a nombre de sus hijos. Allí recibieron el 2004.



Guillermo Berto
Gerardo Bilardo





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